Un tema muy importante que se pasa por la cabeza de las madres después de haber parido a sus hijos es la cuestión de disminuir el peso que tomaron durante el embarazo. Más allá de que el niño, o niña, sea lo fundamental en las vidas de las mujeres es recomendable que rápidamente vuelvan a hacer ejercicio para perder calorías, además de acompañar la gimnasia con una alimentación adecuada.
Una gran ayuda para este proceso es cuando se amamanta a los hijos. En esa acción las mujeres pierden demasiado del peso incorporado en el periodo de gestación del bebé.
Además, según profesionales vinculados al tema como son los médicos hay una gran necesidad imperante de incluir una mayor cantidad de lácteos en la dieta que se utiliza. Si uno se basa en los últimos estudios que se hicieron hay que tener en cuenta que los productos ricos en calcio modifican la capacidad de quemar grasas, y por lo tanto, aumentan el metabolismo.
Otro de los consejos que se suele brindar a las madres que se encuentran desesperadas por bajar kilogramos, es la caminata y la intensa actividad que produce la nueva vida que causa en una casa la incorporación de una criatura. Si esto se realiza correctamente, el problema del exceso de peso, quedará en el pasado.