Conocer el sexo del bebé es un gran beneficio para todos los padres, debido a que pueden empezar a realizar las adquisiciones de todos los productos necesarios para la habitación del joven, que vendrá al mundo en el futuro más cercano. Además, los colores del ambiente son diferentes, dependiendo si será masculino o femenino el sexo del hijo. Conocer esta información, no sólo le servirá a los padres, sino al resto de las personas allegadas a ellos, debido a que a la hora de realizar un regalo el panorama es distinto, y es mejor tenerlo bien claro para no cometer errores.
Sin embargo, hay varios casos en los cuales se prefiere el misterio y la intriga. En ese sentido, lo que se intenta es decirle al médico que resguarde el dato del sexo, para no tenerlo en cuenta. En el momento del nacimiento, se desvela esa cuestión y, tanto la mamá como el papá, culminan la alegría de todo el período con el conocimiento de su hijo.
El nombre también es un aspecto que se tiene en cuenta para saber el sexo del bebé, debido a que, por motivos obvios, son distintos los de un niño a la de una niña. En los casos que se mencionaron en el párrafo anterior lo que se hace es tener la alternativa de ambas situaciones que se pueden llegar a presentar. Luego, en el momento preciso se sabe por cual se escogerá.
Hay que mencionar que hay distintos contextos que no permiten esa característica del suspenso. La razón fundamental de esto es que no se cuenta con un caudal económico importante como para salir al mercado a incorporar todos los elementos de golpe. Hay familias que utilizan las promociones, y terminan pagando los productos en cuotas para alivianar el gasto que se tiene que efectuar.