Es importante conocer el tipo de alimentación que requieren los bebes recién nacidos, para evitar posibles problemas en el desarrollo del niño. Muchas madres primerizas desconocen el hecho que solo los primeros seis meses es únicamente y exclusivo darle el pecho al niño.
La lactancia materna beneficia al bebe ya que permite proteger al organismo de muchas infecciones. La naturaleza es sabia y hay que respetarla. Ningún producto reemplaza a la leche producida por la madre.
Nunca se debe cambiar los hábitos de alimentación del niño y darle comida solida antes de los seis meses.
Pasado este periodo de tiempo, el niño puede comenzar a ingerir papillas, los primeros semisólidos y se continua dando el pecho pero en menor frecuencia. Una vez que el bebe vaya adquiriendo el habito alimenticio, será necesario comenzar por darle cereales, puré de frutas y purés de verduras.
A los siete meses el bebe esta listo para comenzar a alimentarse de flanes, postrecitos, verduras de hoja verde, polenta, arroz, carnes rojas (el hígado es ideal) y carnes blancas.
Un alimento que siempre recomiendan evitar los pediatras es la miel. No se le debe dar miel a un niño menor de tres años, debido a que puede transmitir botulismo. También son peligrosos y conocidos por causar asfixia los caramelos, el maní, el pochoclo, el choclo y frutas secas.
Hay que dejar que el niño aprenda a comer, no importa cuantas veces tire o escupa la comida; es parte del juego del aprendizaje. Paciencia ante todo.
Es muy importante tener cuidado con las carnes que se le dan al niño. Recientemente ha salido en los diarios del mundo el caso de un niño de diez meses que pesa 20 kilos. Esto se ha debido posiblemente a la cantidad de hormonas consumidas a través de los alimentos mal proporcionados por los padres desinformados.